Miro hacia atrás, y cómo echo de menos los 6 meses de Seattle. Han pasado ya seis meses desde que volvimos tanto como los que estuvimos y que he hecho, poco... trabajar, conducir, estresarme, engordar...
Una vida que no me gusta. Claro que como me dice todo el mundo, es que sin trabajar no puedes estar, lo sé. Pero sí en lo que me gusta, ¿no? ¿es tanto pedir?
Sé que no debo de mirar atrás, lo hecho hecho está y pasó. Pero no lo puedo evitar. Me encartaría volver a un año atrás.
Por el momento el futuro es incertidumbre, con poca luz, miope, inestable...
2 comentarios:
De verdad...y que no me dijeras que habías vuelto a escribir en el blog...
Tía, ahora mismo, desde Seattle otra vez, te secuestraba y te traía de nuevo conmigo. Aquí o donde sea.
Todo menos ver que ese destello que tenías en los ojos hace 6 meses se apague.
TQ
Hola cariñín; si quieres un consejo del primo Faty te diré que uno tiene que ser feliz y estar a gusto donde viva, y si eras más feliz en Seattle de lo que eres en Madrid, pues ya sabes, vuelvete a liar la manta a la cabeza y regresa al Pacífico, que al fian y al cabo, el hogar es donde uno tiene su amor y deja el abrigo al llegar a casa.
Luchar por un sueño no es ninguna tontería, y ser feliz es el mejor sueño que se puede tener.
Besos a los dos, From Canary Islands to Madrid & Seattle
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